Dedicado con todo mi amor a JOSEP Y A SU COMPAÑERA, a él para que la cuide y a ella para que siga corriendo como la niña que es.
Este disco me supera, o mejor, me hace superar, el paso del
tiempo, el hastío existencial cuando las cosas vienen mal dadas y, todavía
mejor, potencia mi alegría cuando vienen bien dadas. Tengo una especie de deuda
sentimental con la obra de MARK CUNNINGHAM, con toda su obra, desde MARS hasta DON
KING y JOHN GAVANTI pasando por RAEO, BÉSTIA FÈRIDA , CONVOLUTION y su ultimo proyecto, BLOOD QUARTET.
Es su
único disco en solitario, aunque cuenta con las colaboraciones puntuales de
SILVIA MESTRES y de ORIOL ROSSELL. Editado en POR CARIDAD PRODUCCIONES en
1997 en CD y reeditado en 2013 por FEEDING TUBE RECORDS en vinilo. La versión que posteo es la primera y prefiero ripearla directamente en WAV.
La serenidad que me provoca esta
música es algo exclusivamente personal para lo que no tengo explicación. BLOOD
MERDIDIAN, el tema, es como la banda sonora de un niño corriendo veloz detrás de un
animal inexistente a lo largo de una calle que sí existe. Cuando el niño está a
punto de alcanzarlo, la calle se termina y el animal desaparece. El niño jadea
y sigue corriendo, el animal vuelve a aparecer delante de él y la calle también, pero más
corta y más nocturna. El niño soy yo pero su cara no es la mía, el animal es la
vida y tiene innumerables patas. La calle es lo único real y que puedo
reconocer como un espacio físico concreto, aquél en el que jugaba a la pelota
con 5 o 6 años y en el que organizábamos carreras yo y mis amigos, ajenos a
todo lo que no fuera correr más que los demás. O sea, mi única patria, la de mi
infancia. No es un país, es un territorio mental, una calle en la que ya no vivo y por la que ya no
corro. El animal sigue allí, se le multiplican las patas y me mira agazapado en
actitud de reto ( ¿ a que no me pillas…?).
Ininteligible, lo sé. Un coñazo, lo sé. Pero me importa un
carajo.
ENLACE MEGA
Millones de gracias amigo. Eres lo más de lo más y no te merezco.
ResponderEliminarUn abrazo gigante de parte de ambos.